Hola, como habrás visto, amable lector internauta, mi nombre es Jonathan Bernad Ontiveros. Nací hace ya unos cuantos años en la mediterránea ciudad de Barcelona (España) aunque tuve la dicha de criarme en un lugar paradisíaco como la isla de Tenerife en el Archipiélago Canario; allí, a las faldas del Teide, concretamente en una acogedora población llamada La Orotava, lugar donde mis padres fueron misioneros muchos años. Lo mejor de toda esa estadía fue que en ese lugar tuve la bendición de conocer personalmente al Señor Jesucristo comJonathan & Marisa BERNAD o Salvador de mi vida cuando yo contaba seis años de edad; ha sido la experiencia más profunda de mi vida y aún hoy, bastantes añosmás tarde, sigue siendo algo real. El Señor me dio esposa bien lejos de las Islas Canarias y así desde finales de 1989 hasta finales del año 2007 tuve la grandísima bendición de vivir en la bella ciudad gallega de Pontevedra, donde me casé con María Luisa Castro Ruadas (Marisa), quien conoció Jesucristo como Salvador de su vida cuando contaba ella unos 18 años. Pontevedra da nombre a una de las Rías Baixas de Galicia, situada en el N.O. de España. Desde luego que cada lugar del mundo tiene su encanto y en todos lados se ve la fantasía creadora de Dios pero tanto en las Islas Canarias con su agreste y volcánica geografía como en el verdor y humedad de Galicia uno ve que… ¡¡Dios se esmeró!!.

Durante muchos años, hasta el 2002, tuvimos el gozo de congregarnos en la Iglesia de la Asamblea de Hermanos de la ciudad de Pontevedra, con el pastor Suso Ares (mi segundo padre), donde siempre estuvimos comprometidos en la Obra de Dios en diversos ministerios y puestos de responsabilidad. En ese año, dando un gigantesco paso de fe que, con los años hemos entendido el por qué Dios nos movió a tal decisión, comenzamos a integrarnos en la Iglesia "Jesús Vive" de la misma ciudad, siendo pastoreada en aquel tiempo por su fundador, el amado Pablo Rois, hoy ya en la presencia del Señor.

En ese mismo periodo, y durante cuatro años (1 de Julio de 2003 a 30 de Junio de 2007) pastoreando un pequeño grupo que se congregaba en A Pobra do Caramiñal, población del sur de la provincia de A Coruña, en la comarca del Barbanza. Dios nos dio la bendición de servirle esos cuatro años viendo cómo algunos seguían fielmente al Señor, otros también le conocían; fue una experiencia bien intensa y gratificante, a la vez que todo un entrenamiento misionero. En esos cuatro años se repartieron unos 30.000 folletos y se hizo todo tipo de actividades evangelísticas. Al concluir los hermanos fueron integrándose en iglesias de la zona. En ese tiempo fue interesante el poder conocer otras iglesias y realidades denominacionales, dando gracias a Dios porque nos abrió los ojos y el corazón a situaciones diversas que han resultado, en todos los casos, enriquecedoras. Pudimos, además, no sólo conocer sino tener amistad, que perdura con el paso de los años conservamos y que son auténtica bendición y frescura a nuestra vida, con hermanos y hermanas de distintas familias cristianas.

Desde Abril de 2001 y hasta abril de 2008 colaboré en Radio Amistad - Ondas de Vida, desde Vigo para el sur de Galicia y norte de Portugal, con un programa diario de unos 10-15 llamado “Reflexiones de un Cristiano Imperfecto” y desde Septiembre del mismo año con otro semanal denominado “La Escalera” de una hora de duración. Fue toda una bendición, obviamente, poder compartir de Dios a través de las ondas de la radio y llegar a tantos hogares gallegos.

Durante todo el año 2007 fue un gozo, igualmente, colaborar con los hermanos de Ribeira en un programa semanal de radio en la emisora municipal; fue una colaboración mensual con ellos en un espacio de unos 20 minutos llamado "Compartiendo Buenas Nuevas".

El ministerio en este medio de Internet comenzó en los primeros días de mayo de 1.999 y desde entonces son muchas, asimismo, las bendiciones que tanto mi esposa como yo hemos recibido por este medio. Gracias a cada uno de ustedes por orar, por escribir, por tener carga en el corazón.

Durante cinco años (2007-2012) servimos a Dios en la paradisiaca isla de La Palma; fue un tiempo hermoso, intenso e inolvidable. Actualmente estamos de nuevo en Galicia.

Obviamente las responsabilidades se han ampliado y la vida es bien diferente pero, como el salmista, decimos, “en tu mano están mis tiempos” (Salmo 31:15)

Sirva todo esto no para decir qué hago sino para compartir el gozo de lo que hago y para que quien lo considere oportuno pueda orar por mí. De corazón son las palabras que dicen: “siervos inútiles somos pues hacemos lo que tenemos que hacer” (Lucas 17:10)..